Nahla Haidar, integrante del Comité para la Eliminación de la Discriminación contra la Mujer de la ONU, manifestó el temor que la dirigente indígena Milagro Sala, presa en la Argentina desde el 16 de enero de 2016, sea objeto de un “arreglo de cuentas”, en declaraciones exclusivas para esta página web desde Ginebra.
“ … sabemos que hay una transición política (en Argentina), y cuando en un país hay un cambio político, a menudo hay arreglos de cuentas … Es una mujer, activista histórica, que durante largo tiempo a representado a un grupo que para nosotros son los que tratan de preservar sus modos de vida, sus culturas, que ha militado durante años, y defiende los derechos humanos, ¿la han penalizado?. Eso nos concierne”, argumentó Haidar.
“En el caso de Milagro Sala tenemos el sentimiento que hay un cúmulo de acusaciones y procedimientos… si al final del proceso será culpable de lo que la acusan, desvío de fondos y corrupción, sobre eso no nos pronunciamos, es la justicia argentina que va a pronunciarse”, aclaró Haidar, una de los 23 miembros de este Comité, encargado de vigilar el cumplimiento de la Convención sobre la Eliminación de todas las formas Discriminación contra la Mujer de la ONU.
Sin embargo, Haidar reclamó que Sala “sea liberada para comparecer en sus procesos, que sean transparentes, no hay razones que se va a fugar, que vaya a escapar. Es una cuestión de acceso a la justicia que nuestra Convención trata en los artículos 1 y 2”, según el marco de una Convención que Argentina ratificara en 1985.
Inicialmente acusada judicialmente de sedición, supuestamente por organizar una protesta en la Plaza Belgrano de la capital de la Provincia de Jujuy, Milagro Sala, líder de la organización barrial “Tupac Amaru”, fue entonces detenida, pero luego liberada, para ser inmediatamente acusada de varios delitos, entre ellos “defraudación en perjuicio del Estado, extorsión y asociación ilícita”, por los cuales continua detenida.
“ … sabiendo su trayectoria de activista y defensora de poblaciones autóctonas, queremos que respeten sus derechos, que tenga un proceso equitativo, y sea puesta en libertad hasta la decisión final del procedimiento judicial. Y que el juicio se haga en las mejores condiciones”, recalcó la experta de origen libanesa, que como todos los expertos designados por la ONU trabajan gratuitamente, a los que solo se les reembolsan sus viáticos.
“En ese contexto preguntamos que iban a hacer para ponerla en libertad y el gobierno argentino nos respondió que la decisión del Grupo de Trabajo sobre la Detención Arbitraria (adoptada el 27 de octubre pasado, solicitando la “liberación inmediata” de Milagro Sala) había sido trasmitida a la Provincia de Jujuy, que como es sabido en los países que tienen una estructura federal, es la mejor forma de no responder”, añadió la representante de la ONU.
“Si la práctica de la detenciones arbitrarias vuelven a la Argentina, con su historia, es prohibitivo, no debe abusarse con las detenciones arbitrarias en esos países que han conocido periodos negros, somos sensibles a esas cuestiones, si esas prácticas vuelven entonces sacamos la bandera roja”, concluyó la experta Nahla Haidar.
Juan Gasparini, Ginebra, Suiza.