Cumplo en informar que, en tanto víctima de le represión de la dictadura militar 1976-1983, y sobreviviente del centro clandestino de detención que funcionara la ESMA, he donado para su exhibición en el Museo Sitio de Memoria ESMA el «tabique» que me impusieran los verdugos para cubrir la vista en aquel centro de tortura y exterminio. Al igual que los testimonios que brindara sobre mi cautiverio en los juicios a los que he sido convocado por los tribunales, espero que la donación sirva para mostrar al público que acude al Museo una prueba más del drama enfrentado por los desaparecidos y sobrevivientes.
Desde Ginebra, Juan Gasparini.