Editorial
El periodista y el militante En tanto observador del mundo, el periodista arroja una apreciación individual, distinta a la del militante, partícipe de un deseo colectivo. El periodista debe manifestar una toma de conciencia de la complejidad de la actividad política, sus contradicciones, puntualizando las diferencias que a veces se dan entre las promesas y la claudicación en los actos. Le cabe asimismo señalar el contexto, donde la supremacía de los imperativos de los partidos, clanes y organizaciones, suelen imponerse al interés general.En cambio, el militante asume gregariamente un proyecto y lo defiende tenazmente, abrazando sus claroscuros y concesiones. Resiste a la crítica y batalla para tomar o mantenerse en el poder. Por el contrario el periodista es una suerte de mercenario con principios. Gana un salario pero no escribe cualquier cosa. Tiene móviles y valores autónomos para apreciar la acción política, independientemente de compromisos sectoriales e ideologías. Su oficio es solitario. Fecunda obteniendo la confianza y el apoyo de los demás. Lo motiva la curiosidad y el entusiasmo por la información. Necesita firmeza para adquirir el conocimiento, enfrentar los obstáculos del combate profesional, y vencer a la ignorancia y el miedo.
ÚLTIMA NOTICIA
¿Quien le teme al «Crink»?, heredero del movimiento de países no alineados
El acrónimo «Crink», atribuido al politólogo canadiense Peter Van Praagh, identifica a China, Rusia, Iran y Corea del Norte, entre los afiliados al Sud-Global que se alinean en el «Brics+». Preconizan un sistema financiero autónomo del Occidental…
ÚLTIMO REPORTAJE
La ONU denuncia la «crisis carcelaria» en Ecuador
El Comité de Derechos Humanos de la ONU, que vigila el cumplimiento del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos, denunció la superpoblación carcelaria en Ecuador, calificándola de «grave problema», debido a la «violencia en las cárceles cometidas durante los motines de prisioneros, que causaron la muerte de 600 personas privadas de libertad, entre 2018 y 2023», según un debate…
LIBRO DESTACADO
Borges, la posesión póstuma
Borges desconcertó en sus tramos finales, al refugiarse inesperadamente en Ginebra, donde falleció el 14 junio de 1986. Durante esos seis meses exploró la posibilidad de obtener un permiso de residencia, preambulo del pedido de la nacionalidad helvética, cuya realización quedó trunca al caerle la muerte. La unión de Borges con María Kodama fue matriculada el 26 de abril de 1986 en el caserio de Colonia Rojas Silva, en Paraguay, mientras la pareja permanecía…