México es el segundo país más peligroso del mundo para los periodistas

México es el segundo país más peligroso del mundo para los periodistas

Dos periodistas mejicanos testimoniaron en la sede de la ONU en Ginebra, invitados por la ONG Freedom House, y expertos de Naciones Unidas hacen recomendacioones al gobierno de Felipe Calderón para proteger a los periodistas.

«La situación es la más terrible de los últimos años. Méjico es el segundo país más peligroso para ejercer el periodismo. Desde el 2009 fueron asesinados 83 periodistas», manifiesta Victor Quintana, activo en la prensa escrita y n televisión, quien atribuye a Pakistan el primer lugar de esos paises hostiles a los reporteros.

«En el Estado de Chihuahua, que ha sido el más tocado por la violencia, del que vengo yo, es un Estado que tiene 3 millones de habitantes, el más grande de México, han habido tres periodistas asesinados de 2008 a 2012 y en los últimos ocho meses, tan solo en Ciudad Juarez, quince periodistas atacados por la policía muncipal», detalla Quintana.

«¿A que se debe esto?. Yo pienso que en buena parte es por la presencia de los carteles de la droga y su vinculación con la policía», asegura Quintana.

«… los homicidios nunca abiertamente son cometidos por fuerzas del Estado, son cometidos siempre por sicarios, por gatilleros, pero en el día a día, todo lo que son golpear periodistas, detenerlos, quitarles la cámaras, esto si lo hacen las fuerzas del Estado», explica Quintana.

«Cuando ven que son expuestos por los periodistas porque estan ejerciendo una acción autoritaria, porque se estan dejando corromper, los policias federales municipales y el Ejército se van contra los periodistas», da cuenta Quintana.

«La impunidad que se vive en el país se aplica no solo a los periodistas sino a todos los ciudadanos y entonces también repercute en el trabajo de informar, y esto ha generado zonas de silencio en el país, son zonas donde los medios han dejado de informar sobre la violencia», añade por su lado Margarita Torres, investigadora de la red Periodistas de a pie en México, asimismo invitada por Freedom House a Ginebra.

«En algunas regiones ni siquiera se tiene claridad de donde vienen los ataques, de donde vienen las amenazas, cuales son los vínculos, si hay vínculos antre autoridades con el crimen organizado, esa es la complejidad de la situación que se está viviendo porque no se sabe quienes contra quienes estan combatiendo y también los mismos periodistas se quedan en el medio tratando de cubrir la información», describe Torres.

«Hay aque ponerle rostro a los numeros, estos numeros que está arrojando la lucha contra el narcotráfico en el país, ¿quienes son las víctimas?, ya se habla de alrededor de casi 60 mil muertos, ¿que está haciendo la sociedad para mantenerse de pie ante las condiciones que se estan viviendo?, queremos generar profesionalización periodística para cubrir esta realidad que estamos viviendo», interrogantes y desafios que constituyen los retos de la red Periodistas de a pie, según Torres.

Al propio tiempo, en un informe que se acaba de presentar ante el Consejo de Derechos Humanos de la ONU en Ginebra, expertos independientes de este organismo enumeran a trece periodistas desaparecidos en México desde 2000, cuatro de ellos en 2010. Indican que en la mayoría de los casos, «la falta de investigación no permite encontrar las causas y los perpetradores de estos delitos». Los periodistas más expuestos a desaparecer son los que se ocupan de «asuntos locales como actos de corrupción en el Gobierno, tráfico de drogas, crimen organizado, seguridad pública y temas relacionados», contabiliza la ONU.

Los expertos lamentan que la Fiscalía Especial creada en la Procuraduría General de la República (PGR) en 2006 «para los delitos cometidos contra la libertad de expresión», y la firma de «un convenio para la protección de periodistas», no haya «producido resultados efectivos hasta el momento».

Para remediar la situación, la ONU «recomienda establecer un mecanismo nacional de protección de periodistas, implementado por funcionarios de alto nivel, y un comité interinstitucional, dirigido por una autoridad federal, con capacidad de coordinar a diferentes autoridades e instacias gubernamentales, con recursos propios y suficientes, y que garantice la participación de los periodistas asi como de la sociedad civil en su diseño, operación y evaluación».

Juan Gasparini, Ginebra, Suiza.